DIEGO PRADO
(Mahón, Isla de Menorca, 1970), estudió Delineación y Geografía e Historia, desempeñó a lo largo de los años más de 15 empleos distintos (de limpiador de aviones a vendedor de zapatos, de oficinista a repartidor de prensa, de conserje a ordenanza de archivo clínico), e hizo sus veces como actor teatral, cantante lírico y locutor de radio. Desde muy joven viene ejerciendo el columnismo y la crítica literaria en distintos medios, labor por la que obtuvo en 1994 el Premio Mateo Seguí Puntas de periodismo. Desde 2002 vive confinado en Hospitalet de Llobregat.Ha publicado los libros de relatos Las espigas de la imprudencia (2003) y Domingos buscando el mar (Premio Café Món de Narrativa, 2007) y la novela En algún lugar te espero (accésit del Premio Gabriel Sijé, 2000). Asimismo ha obtenido premios y menciones en algunos certámenes de cuento (Revista Mujer 21, El Fungible, Francisco Candel, Internacional Max Aub, Círculo Cultural Faroni, etc.) y ha sido incluido en diversas antologías de relatos.
| HOSPITAL CÍNICO Diego Prado 216 páginas. Novela
ISBN 978-84-941437-4-8
15 €
Hospital Cínico transcurre a lo largo de las 24 horas en un gran hospital de Barcelona, lugar donde trabaja el protagonista, un auxiliar de archivo clínico que aspira a ser escritor y que va todo el día tomando notas para una futura novela que planea escribir. A su alrededor, casi sin verse, se mueven una serie de personajes, excéntricos unos, patéticos otros, tiernos y desamparados la mayoría, desde una doctora obsesionada con las enfermedades ajenas o un cura agobiado por las tentaciones, a un camillero liante, un escritor consagrado que mantiene su enfermedad en secreto o un médico con aires de grandeza que comercia con un nuevo fármaco capaz de eliminar temporalmente los recuerdos. El fantasma rondador de una monja negra, la aparición desde el pasado de una mujer fascinante, el doble de Roberto Bolaño andando por los pasillos y un gran apagón que los envolverá a todos completa el cuadro de una historia que, como su propio título indica, tiene mucho de cínica, escrita en un estilo a la vez irónico y lírico, de lenguaje trabajado pero sencillo, donde se reivindica el viejo placer de fabular y donde los límites entre la realidad y la ficción se difuminan y se mezclan hasta componer un collage de vidas unidas por el absurdo y los miedos cotidianos.
|